MOSCÚ (AP) Un alto funcionario ruso advirtió el jueves que Moscú podría considerar las sanciones occidentales un motivo para declarar la guerra.
El subsecretario del Consejo de Seguridad ruso Dmitry Medvedev, un organismo dirigido por el presidente Vladimir Putin, calificó las restricciones occidentales de “groseras y cínicas” y rayanas en la “guerra económica”.
“Bajo ciertas circunstancias, medidas tan hostiles se podrían considerar un acto de agresión internacional o incluso un casus belli”, dijo Medvedev en un foro legal, empleando la expresión latina que significa causa o pretexto para declarar la guerra. “En respuesta a ellas, un Estado se reserva el derecho de la defensa individual y colectiva”.
Subrayó que las sanciones occidentales ante las acciones militares rusas en Ucrania “tienen un objetivo claro: infligir el mayor dolor posible a la mayor cantidad posible de ciudadanos de nuestro país… a los ciudadanos comunes, no a la conducción del país ni las elites empresarias”
“El objetivo principal es castigar al pueblo ruso mediante el intento de reducir la actividad económica y provocar hiperinflación”, añadió. Funcionarios rusos han tratado de minimizar el impacto de las sanciones rusas, y la declaración de Medvedev representó uno de los escasos reconocimientos de que se siente ese impacto.
Medvedev fue presidente en 2008-12, cuando Putin pasó a ocupar el puesto de primer ministro debido a los límites constitucionales. En occidente se lo consideraba un político más bien moderado, pero en los últimos meses sus declaraciones han sido más duras que las de los funcionarios más belicosos del Kremlin.